¿Vale la pena el ayuno intermitente?
En los últimos años, el ayuno intermitente ha sido ampliamente adoptado por los gurús del fitness y los expertos en salud, citando como posibles beneficios el aumento de los niveles de energía, la mejora de la salud metabólica y reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares. Con la preocupación que rodea al COVID-19, también hay un creciente interés en sus efectos de refuerzo inmunológico.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que también hay posibles implicaciones para la salud asociadas a un patrón de alimentación tan restrictivo.
"Aunque el ayuno puede reforzar el sistema inmunológico, hay que asegurarse de tener suficientes micronutrientes y macronutrientes para mantener todo el cuerpo fuerte", dice el doctor Chris Meletis, N.D. "Las vitaminas, los minerales y las calorías son esenciales para que el sistema inmunológico funcione correctamente”.
En resumen, el ayuno intermitente se considera una forma de limpiar el cuerpo de toxinas y reforzar la inmunidad mediante la asignación de “ventanas” de tiempo para las comidas y el ayuno entre ellas. Dependiendo del tipo de método de ayuno que se elija, puede ser cualquier cosa, desde el formato clásico 16/8, en el que las comidas se limitan a una ventana de 8 horas, hasta un ayuno semanal de 24 horas.
Meletis afirma que los pacientes que parecen beneficiarse más del ayuno intermitente son los que padecen prediabetes o sistema metabólico, así como los que tienen como objetivo perder el exceso de peso.
"Algunas personas simplemente tienen una relación poco saludable con la comida y el sentido de estructura que viene del ayuno intermitente realmente les ayuda", dice.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que el ayuno intermitente no es para todo el mundo. La genética, la ascendencia y el historial médico influyen en el efecto que una dieta de ayuno puede tener en la salud de una persona.
"Si padeces hipoglucemia, el ayuno intermitente puede presentar algunos riesgos muy reales", afirma Meletis. Además de los signos habituales de un nivel bajo de azúcar en la sangre, como fatiga, temblores y latidos irregulares; la hipoglucemia puede provocar síntomas más graves, como visión borrosa, convulsiones y pérdida de conciencia.
En general, el ayuno intermitente tampoco se recomienda a las personas con antecedentes de trastornos alimenticios. También es importante tener en cuenta la salud mental y los trastornos del estado de ánimo, dice Meletis, dado que nuestro intestino y nuestro cerebro están estrechamente conectados.
"El ayuno puede ser estresante", dice. "Estás robando glucosa al cerebro y al cuerpo, lo que puede provocar un pico de cortisol, la principal hormona del estrés de tu cuerpo".
Dado que nuestro cuerpo y nuestras hormonas son tan complejos, los efectos del ayuno intermitente también pueden variar mucho de una persona a otra. Por ejemplo, las hormonas tiroideas suelen disminuir durante el ayuno, lo que puede provocar un pico de T3 inversa(rT3), ralentizando el metabolismo y dificultando la pérdida de peso. Por el contrario, según Meletis, quienes ya tienen un peso corporal bajo pueden correr el riesgo de perderlo con el ayuno.
"No todo el mundo puede ayunar de forma saludable durante 16 horas y seguir alcanzando sus objetivos de salud", afirma. "Por esta razón, un enfoque personalizado es clave."
Incluso cuando se utiliza el ayuno intermitente como herramienta de pérdida de peso, dice Meletis, es crucial asegurarse de que se consumen suficientes proteínas y alimentos ricos en nutrientes a lo largo del día. Tratar de incluir los mismos alimentos y porciones en una ventana de tiempo más reducida es contraproducente e insostenible, afirma.
Antes de decidirte a experimentar con el ayuno intermitente, es importante que hables con tu médico de atención primaria, ya que ciertos medicamentos pueden provocar una bajada de azúcar en la sangre. También es una buena idea hacerse algunas pruebas de referencia para medir los electrolitos, el azúcar en sangre y los niveles de cortisol.
"En un mundo en el que 'más' se considera 'mejor', mucha gente presiona su cuerpo demasiado rápido durante demasiado tiempo", dice. "Cuando se trata del ayuno intermitente, escuchar a tu cuerpo es crucial."